La policía de Amarillo anuncia que se ha cerrado un caso sin resolver de 1976

AMARILLO, Texas (KEYU) -En una conferencia de prensa esta tarde, la policía de Amarillo anunció que la Unidad de Casos Sin Resolver resolvió un caso de asesinato sin resolver de 1976.
El comandante de la Unidad de Homicidios del Departamento de Policía de Amarillo, James Clements, dijo que el 14 de diciembre de 1976, Barbara Ann García fue brutalmente asesinada en su casa en la calle North Magnolia.
Después del asesinato, la familia de García la encontró en el patio trasero de la casa.
Clements dice que la causa de la muerte de García fue trauma por fuerza contundente.
La hija de 5 meses de García, Natasha García, también fue encontrada viva en la casa. La policía dice que estuvo sola durante más de 23 horas después del asesinato de su madre.
Los detectives utilizaron pruebas, testigos e información para investigar el caso en 1976, pero el caso quedó en el olvido debido a la falta de pruebas y testigos comprobables.
En diciembre de 2022, se estableció la Unidad de Casos Sin Resolver del Departamento de Policía de Amarillo. La Unidad de Casos Sin Resolver de los Texas Rangers volvió a enviar evidencia del caso al Departamento de Seguridad Pública de Texas en junio de 2023.
En agosto de 2024, se notificó a los funcionarios que se encontró ADN en un par de zapatos que se recolectaron como evidencia.
El ADN coincidió con el de Billy Gene Cummings, de 73 años, que vivía en Tucson, Arizona, en ese momento.
A medida que los funcionarios avanzaban para procesar a Cummings, descubrieron que había muerto en Arizona hace varios años.
Clements dijo que, aunque no pudieron procesar a Cummings, el Departamento de Policía de Amarillo espera que esto le dé un cierre a la familia para saber qué sucedió en 1976.
Meredith Pinkham, la primera asistente del fiscal de distrito de la Oficina del Fiscal de Distrito 47, dijo que espera que esta información le ofrezca a la familia de García un cierre y paz.
Natasha García, la hija de Barbara que estaba presente en el momento del asesinato, dijo: “He esperado literalmente toda mi vida para que llegara este día y este momento”.
“No siento que se haya cerrado el caso, nunca lo voy a cerrar. No siento que haya justicia. Lo que estoy pidiendo ahora es paz”, continuó Natasha García. “Quería que el día que llegue a la corte pudiera enfrentarlo y tener una declaración para él, para hacerle saber lo que le hizo a mi vida. Pero, por desgracia, eso nunca sucederá. Supongo que ahora solo tratamos de seguir adelante y encontrar algo de paz”.
El caso, que estuvo sin resolver durante 48 años, ahora está oficialmente cerrado.
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