Mujer de Friona es acusada de delito federal tras tomar como rehenes a 17 inmigrantes
AMARILLO, Texas (KEYU) -Autoridades dijeron que una mujer de Friona fue acusada de un delito federal después de que la policía afirmara que tenía como rehenes a 17 inmigrantes.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos dijo que Manuela Magdalena Jimón Castro, de 30 años, fue acusada de una denuncia penal por albergar a extranjeros.
Castro hizo su primera aparición hoy en la corte.
La denuncia dice que Castro y un familiar se asociaron con una operación de contrabando de inmigrantes ilegales para retener rehenes indocumentados en su casa en Friona.
Los rehenes fueron amenazados con ser privados de comida y agua. Tampoco se les permitía irse hasta que pagaran entre $11,000 y $12,000 o “saldaran” la deuda.
La investigación comenzó cuando la policía de California recibió un aviso de una mujer que decía que su hermana estaba detenida para pedir un rescate en Texas.
La mujer dijo que su hermana había viajado de Guatemala a México con la intención de buscar asilo en Estados Unidos.
La hermana cruzó la frontera y fue capturada por un cartel mexicano, donde estuvo cautiva.
La hermana envió un pin de su ubicación en Friona antes de escapar.
Una entrevista con la policía reveló que, mientras estaba en México, fue forzada a subir a un automóvil a punta de pistola por personas que creía que eran miembros de un cartel de contrabando, según la denuncia.
Después de varios meses, la acompañaron a través de la frontera sur, la llevaron a diferentes casas en Texas y Nuevo México y se negaron a dejarla ir hasta que pagara su deuda.
Luego la enviaron a la casa de Friona, donde le dijeron que la detendrían hasta que pagara $12,000.
Después de la entrevista, la policía registró la casa y recuperó a 17 inmigrantes indocumentados, incluidos dos niños.
La denuncia penal dice que las 17 personas intentaron esconderse en el ático, en armarios o dentro de bolsas cubiertas con mantas.
La casa tenía muy pocos muebles, a excepción de colchones y mantas para un gran grupo de personas en el piso.
Otras entrevistas con las víctimas revelaron que habían ingresado ilegalmente al país con contrabandistas.
Dijeron que los contrabandistas habían confiscado sus teléfonos y solo permitían el contacto intermitente con miembros de la familia para obtener dinero para pagar sus “cuotas de entrada”, muestra la denuncia.
Algunas de las víctimas dijeron que creían que tenían que quedarse en la casa de Friona hasta que pagaran la entrada en su totalidad.
Si es declarada culpable, enfrenta hasta cinco años en una prisión federal.
Derechos de Autor KEYU 2022. Todos los Derechos Reservados
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